La iniciación masónica se vive en la logia. No obstante, los ideales de la Francmasonería exigen vínculos fraternales entre los Francmasones y la posibilidad de diálogo entre las logias. En 1717, cuatro logias de Londres decidieron formalizar estos intercambios y fomentarlos mediante la creación de una obediencia.
Posteriormente, el movimiento masónico se propagó en Gran Bretaña, en Europa, en América y luego en otros países. Sus formas más antiguas han cobrado nuevo vigor. Sin embargo, al difundirse inevitablemente se diversificó en función de los contextos locales en los que ha evolucionado. Los fundamentos siguen siendo los mismos y todos los Francmasones reconocen como base de su movimiento la Constitución de Anderson de 1723, pero esta evolución ha terminado por crear un abismo entre las dos principales corrientes del movimiento.
El proyecto de la Confederación intenta tender un puente que supere este abismo para facilitar nuevamente los intercambios entre todos los Francmasones, respetando la diversidad de sus obediencias y sus reagrupamientos.
Esta propuesta corresponde a las intenciones de los fundadores de la Francmasonería moderna que siguen conservando su actualidad. "Establecer una estrella y una amistad sólida entre personas que jamás se hubieran conocido", "reunir lo que está disperso", ser "el centro de la unión", no significa "uniformizar" seres humanos diferentes sino permitir su vida en común.
El mundo del siglo XXI necesita un movimiento de esta naturaleza. En consecuencia, construir este puente redundaría en beneficio de las logias, sus obediencias y la humanidad toda.
Cabe a cada Francmasón hacer el esfuerzo necesario para contribuir a la creación de la Confederación.
La piedra no necesita ser otra cosa que piedra. Sin embargo, reuniéndose a otras, deviene templo. Saint Exupéry
El Llamado de Bratislava es una iniciativa puramente personal. Se desprende del diálogo entre varias decenas de Francmasones de distintos países y distintas afiliaciones, pero ha sido redactado y difundido en mi nombre, sin vínculo a ninguna obediencia.
Carezco de la autoridad necesaria para consultar los directivos de las obediencias, y menos aún para convencerlos del mérito de mi propuesta. Someto su apreciación a la sabiduría de mis hermanos.
Les invito a discutir libremente sobre
- el significado de la francmasonería,
- su posicionamiento en el mundo de hoy,
- la incoherencia entre defender el ideal de la fraternidad unviersal y, al mismo tiempo, negarse a comunicar con otras corrientes de la francmasonería diferentes del propio.
Peter Bu
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Puesto que se trata de la votación sobre un pedido referente a la organización de asociaciones masónicas, se reserva la entrada a sus miembros.